The “un-dead” and the release of sexual discourse: a freudian approach to Bram Stoker’s Dracula

Abstract

Esta ponencia intenta delinear una de las muchas maneras en las que Drácula, de Bram Stoker, puede ser abordada. Se percibe el texto como una propuesta discursiva sobre la sexualidad, en especial desde un punto de vista freudiano/foucaultiano. Los “no muertos”, es decir, los personajes vampíricos, ayudan a elucidar cómo las perspectivas victorianas acerca de la sexualidad afectan la novela y sus temas centrales. Estas nociones se manifiestan a través de representaciones simbólicas y metafóricas, y con un poco de ayuda de Freud y su modelo psicosexual, aquí se describen y se les brinda interpretación a algunas imágenes. Así, los “no muertos” representan la libido, o el deseo sexual, y la liberación del ello, es decir, los impulsos más profundos y fuertes de la psique humana. Por otra parte, en la medida en que ellos amenazan la integridad social y moral de la sociedad victoriana, los personajes humanos a menudo sucumben a sus impulsos más oscuros e impuros, y como resultado, al menos uno se pierde irremediablemente. Finalmente, se analiza el vampirismo como una proyección simbólica de la perversión sexual, bajo la lupa de la definición freudiana del concepto. Para los victorianos, en todo caso, los impulsos inmorales debían ser reprimidos; los vampiros tenían que ser derrotados y toda forma de perversión sexual, erradicada.This paper attempts to delineate one of many ways in which Dracula, by Bram Stoker, may be approached. This work is perceived as a discursive proposal about sexuality, especially from a Freudian/Foucauldian point of view. The “Un-dead,” that is, the vampiric characters, all help elucidate how Victorian perceptions of sexuality affect the novel and its central themes. These notions manifest themselves through symbolic and metaphorical representations, and with a little help from Freud and his psychosexual model, such portrayals are described and explained here. Thus, the “Un-dead” represent the libido, or sexual hunger, and the release of the id, that is, the deepest and strongest impulses of the human psyche. Furthermore, as they threaten the social and moral integrity of Victorian society, the human characters sometimes succumb to their darkest, most impure impulses, and as a result, at least one is utterly lost. Finally, vampirisim is analyzed here as a symbolic projection of sexual perversion under the light of Freud’s definition of the concept. For the Victorians, however, all immoral impulses were to be repressed; the vampires had to be defeated and all forms of sexual perversion, eradicated.