Gonzáles Sánchez David E.2024-09-192024-09-192020-01-011409-4703https://hdl.handle.net/11056/28943Este ensayo propone discutir los significados que se le han otorgado a los estudios sociales en la Escuela de Historia de la Universidad Nacional de Costa Rica, particularmente a los discursos presentes en programas de estudio entre 1979 y 2016. La discusión parte de la pregunta ¿qué significan los estudios sociales en el ámbito académico, más allá de su definición como asignatura escolar? Ante esto, propongo la tesis de que los Estudios Sociales no han logrado un desarrollo académico propio al encontrarse subordinados a la disciplina histórica en lo que llamo campo epistémico hegemónico, que instrumentaliza la pedagogía al limitar su acción a la transmisión de conocimientos disciplinares. Para respaldar la tesis argumento que existen tres tensiones en la relación Historia-Estudios Sociales que ofrecen evidencia de la subordinación. Concluyo que no basta con establecer agendas de investigación sin enfrentar el problema de subordinación epistémica que conlleve a la constitución de un marco de referencia teórico particular que asuma el problema de la enseñanza y aprendizaje de la historia y de lo social. Finalmente, planteo la necesidad de una estrategia de reflexión y de reconstrucción epistémica congruente con la consolidación de los Estudios Sociales como área de investigación y de acción con identidad propia y abierta al diálogo horizontal con las demás disciplinas involucradas en su desarrolloThis essay proposes to discuss the meanings that have been given to social studies in the School of History of the National University of Costa Rica, particularly to the discourses present in study programs between 1979 and 2016. The discussion starts from the question: what ? Do social studies mean in the academic field, beyond its definition as a school subject? Given this, I propose the thesis that Social Studies has not achieved its own academic development as it is subordinated to the historical discipline in what I call hegemonic epistemic field, which instrumentalizes pedagogy by limiting its action to the transmission of disciplinary knowledge. To support the thesis I argue that there are three tensions in the History-Social Studies relationship that offer evidence of subordination. I conclude that it is not enough to establish research agendas without facing the problem of epistemic subordination that leads to the constitution of a particular theoretical framework that takes on the problem of teaching and learning history and social issues. Finally, I raise the need for a strategy of reflection and epistemic reconstruction consistent with the consolidation of Social Studies as an area of research and action with its own identity and open to horizontal dialogue with the other disciplines involved in its development.spaAcceso abiertoAttribution-NonCommercial-NoDerivatives 4.0 Internationalhttp://creativecommons.org/licenses/by-nc-nd/4.0/ESTUDIOS SOCIALESPEDAGOGÍADEBATEHISTORIAENSAYOSSOCIAL STUDIESPEDAGOGYDEBATEHISTORYENSAYOSLos estudios sociales de cara a la historia: provocaciones para un debate urgenteSocial studies and history: a critical approach from a pedagogy reflectionhttp://purl.org/coar/resource_type/c_6501https://doi.org/10.15517/aie.v20i1.40176